Huida de la 3ª Galaxia por XAVI

HUIDA DE LA 3º GALAXIA aka Scape from Galaxy 3, Giochi erotici nella 3ª galassia (1981)

Dir: Bitto Albertini (aka Ben Norman)

Gigantesco. Fabuloso. Sólo de esta manera se puede calificar un Festival de la Caspa de dos días con 10 películas, a cual de mejor/peor calidad. Al final la caspa llegaba a la altura de los tobillos, pero quedamos verdaderamente encantados. Entre las 10 joyas visionadas, este maravilloso truño italiano de ciencia ficción con toquecillos eróticos.

Se puede pensar que la combinación 1981+italiana+ciencia ficción+erotismo puede dar lugar a unos resultados devastadores, y efectivamente es así, pero es obligado verla para llegar a hacerse una idea de lo mala, cutre, ridícula, y por tanto imprescindible y entrañable que resulta para el caspólogo. En el comentario sobre "Año 225 después del holocausto", dejaba caer que esta peli es comparable en cuanto a casposidad, pero me veo obligado a rectificar: esta lo es muchísimo más.

En Huida de la 3ª galaxia se pueden ver maquetas y hasta planos tomados directamente de Starcrash, una de las poquísimas pelis que se le podría comparar en cuanto a caspa. De hecho Huida de la 3ª galaxia, se puede decir que es la 2ª parte no confesa de Starcrash. No os sorprendáis si durante la peli la música cambia abruptamente de una escena a otra, entre medio tempo 70s con mellotron, a música de violines, a ritmillo funky... Se trata solamente de uno de los innumerables encantos de esta cosa.

En el interior de una nave vemos al rey Ceylon con una corona que parece sacada de la clase de trabajos manuales de un colegio. Su hija, Belle Star lleva un traje ajustado al cuerpo… que cubre sólo una de las nalgas y uno de los pechos. El protagonista masculino, Lithan, está vestido con un traje que parece prestado de la gira Love Gun de los KISS. Los guardias permanecen firmes y con la mano izquierda sobre el ombligo ¿retortijones producidos por la comida espacial?

Aparece la nave hostil del malvado, en forma de mano, y empiezan los problemas. El malo, Oraclón, es uno de los puntos fuertes de este entrañable zurullo cinematográfico. Sólo el diseño del personaje es suficiente para que merezca la pena ver la peli. Enormes hombreras y cuello de colores pastel, tomados del más ridículo carnaval de pueblo, purpurina en la barba, túnica plateada, cinturón nuevamente robado de la clase de trabajos manuales de un colegio, perneras de diferente color cada una con rayos dorados, sin faltar por supuesto los calzoncillos por fuera. Me pregunto si este hombre (Don Powell) habrá tenido que soportar durante toda su vida en las bodas, cenas de Navidad… bromas y coñas sobre las cosas que a veces ha de hacer uno para ganarse las habichuelas.

Oraclón conmina al rey Ceylon a rendirse y éste se niega. Comienza la batalla.

Otra característica a destacar de esta película es el lenguaje, decididamente ridículo y que es para tomarse a cachondeo. De acuerdo que debido a Star Wars y a Star Trek se tenga que usar un determinado vocabulario en las películas de ciencia ficción, pero con una base lógica. Porque estar continuamente escuchando chorradas del estilo “ruta decimoquinta dimensión”, “cohetes de vapor de uranio”, “escudo de megarrayos”, “sistema de misiles hipersolares” o “telesonda megamétrica” es para preguntarle al guionista si estaba colocado, si el guión lo hizo su hijo de cinco años, o vete tú a saber. Me encanta la imaginación y la fantasía, pero decir “nos elevamos 1000 grados” es para darte de collejas, John Tomas, chato, como mucho serán 360 digo yo…

La batalla es desopilante. En un espacio lleno de lucecitas de colores, podemos ver como en las explosiones de maquetas salen despedidos los trozos… ¡y cómo los rayos aparecen dentro de las naves por sorpresa sin que la nave explote!

Lithan abre la puerta atascada debido a uno de estos rayos, con su anillo láser. Junto al rey examina lo que se supone es un cuadro de mandos, un mapa estelar, o algo parecido, pero que en realidad es una mesa de billar cubierta con un plástico que tiene tres manchas de colores. Ante lo desesperado de la situación, el rey decide enviar a su hija Belle Star y a Lithan como embajadores para buscar ayuda. Oraclón cree que ha destruido todas las naves del rey…, pero se enfada cuando descubre la nave huída. “¡Idiotas galácticos!” “¡Registrad toda la galaxia oriental con la megasonda hipermegamétrica! ¡Espera! ¡Incluyendo las tangentes cónicas equidistantes!” Sé que es difícil de creer, pero no os estoy tomando el pelo, son frases reales del guión… y por cierto os reto a que nos paséis frases de caspopelis de ciencia ficción que superen a estas. Lo tenéis complicado ciertamente ;)

Mientras, nuestros amigos van a parar, oh casualidad, al planeta Tierra. Cuando la computadora analiza la atmósfera, resulta que está compuesta de oxígeno, CO2… e hidrógeno (¿no será nitrógeno? Aquí demos el beneficio de la duda al guionista aunque no se lo merezca, la cagada quizás se produjera en el doblaje). En el planeta vemos a unos seres humanos que viven de forma muy rural en una aldea con casas que parecen huevos de chocolate gigantes decorados. Aterrizan en lo alto de una peña, y cuando salen y miran alrededor se ven grandes prados (¿no hubiera sido más fácil aterrizar ahí?), bosques, costa, montañas… ¡Lo que costaría actualmente un huevo Kinder de 30 metros cuadrados con ese paisaje al lado!

La gente, asustada, empieza a tirarles piedras. Después la tribu y su anciano jefe se ponen a deliberar sobre qué hacer. Se sienten inclinados a matar a los intrusos ante sus grandes “poderes” (sus armas de rayos). Mientras, Belle Star y Lithan dan un largo paseíto por el bosque y encuentran un lago ante el cual el chico se muestra temeroso porque nunca ha visto el agua; esto nos hace pensar que además de horteras esta gente son unos cerdos de cuidado, imaginaros qué peste dentro de las naves que están siglos vagando por el espacio…

Otra de las más delirantes escenas de la película, la vemos cuando los protagonistas observan a una pareja de aldeanos besándose y deciden imitarles torpemente. Aquí surge otra apasionante pregunta ¿en el espacio se reproducirán por esporas?

Los de la aldea, los rodean con sus lanzas con un fondo de casiotone y los meten en una cueva. “Si usara mis rayos beta podría salir de aquí en un minuto”; claro, seguramente Lithan ha comprado la pistola en Raticulín. Por cierto, cuando los del pueblo están celebrando que quemarán a los intrusos podemos ver que una de las extras olvidó depilarse sus poblados sobacos. Cuando están a punto de ser churruscados, Lithan desde el fondo del barranco donde están, salta sin tomar impulso ni nada a más de 15 metros de altura y salva a un niño que estaba a punto de despeñarse. Belle Star apunta como causa de la sorpresa general “desconocen la fuerza psicoenergética”. Ante esta frase el Festival de la Caspa estuvo a punto de suspenderse por el ataque de risa que nos hizo tirarnos al suelo, casi atragantándonos con las galletas saladas cual George Bush.

Los de la aldea les agradecen la ayuda y les piden excusas. En otra muestra de poder psicoenergético, Lithan construye una presa apilando rocas gigantes, que quedan perfectamente colocadas, sin el menor esfuerzo, con sólo lanzarlas. Los amigos pueblerinos a cambio les empiezan a enseñar los rudimentos del sexo (y Lithan con dos tías, qué planeta más cojonudo).

Y justo en ese momento la nave del malo malísimo Oraclón sobrevuela el planeta. De sus palabras sabemos porqué la Tierra está en ese punto tan bajo de desarrollo: todo fue destruido por una guerra atómica. Mmmmm… esto me suena… Ante la posibilidad que el ataque negrata-funky-espacial pueda perjudicar a sus amigos, Belle Star y Lithan deciden reparar la nave y marcharse. Mientras arreglan los desperfectos la princesa sentencia “Quien ha descubierto los placeres de la vida pierde la inmortalidad” Vaya, o sea que el precio de cuatro achuchones es la muerte, y lo aceptan tan tranquilos, sin alterárseles ni un músculo de la cara y deciden no marcharse… Joder, que sangre fría, yo estaría acojonado ante esa situación.

Amigos, no hay descanso en esta tifa de celuloide. Vienen nuevas imágenes para la risa, el cachondeo y el regocijo. Con música disco instrumental, los del pueblo efectúan una danza ideada por Giorgio Aresu borracho, mientras los protagonistas disfrutan de vino, carne (asada) y frutas. Descubrimos entonces una costumbre estupenda y digna de elogio en este planeta: una vez al año, se efectúa una especie de prueba de valor con fuego, tras la cual el chico ganador se puede beneficiar a la chica que él escoja. El afortunado escoge a Belle Star, ante lo cual Lithan se muestra celoso, pero al final, qué bonito es el amor, all you need is love tatatatará, dejan a sus respectivos rolletes para estar juntos.

Justo cuando por fin se dejan de chorradas y empiezan con las guarreridas españolas, Oraclón el tocapelotas tira unos rayitos sobre el planeta. Ante la siguiente escena otra duda más me asalta: ¿qué tomaría el guionista para escribir semejante imbecilidad sin sentido? Ved si no:

- El anciano del pueblo les dice que han de marcharse ante los últimos acontecimientos

- Ellos contestan que llegaron por casualidad al planeta huyendo de su enemigo y que marcharán para que les siga y así deje a la Tierra en paz

- El anciano ahora contesta que si eso es cierto no pueden dejar que se vayan porque necesitarán sus poderes sobrenaturales para que les defiendan

- La princesa responde que tenían razón cuando les pidieron que se marcharan y que cuando lo hagan no habrá peligro

- El anciano cabreado grita que eso nunca y ordena que los apresen

¿¿¿EN QUÉ COJONES QUEDAMOS???

Pero, oh amigos, los protas guardaban lo mejor para el final: cuando los aldeanos intentan apresarlos ¡¡¡empiezan a disparar rayos con las palmas de las manos!!! Corren hacia la nave, y ante el aburrimiento que les espera por el largo viaje, Belle Star puntualiza que han aprendido “algo” y por fin pueden ponerse manos a la obra sin que les interrumpan.

Además de malo malísimo, Oraclón es gilipollas. Contempla la escena sin saber qué está sucediendo (¿cuándo metió la cámara espía en la nave de los protagonistas?) y antes de destruirlos decide que quiere saber qué les ha pasado para que se comporten tan extrañamente.

Ante la perspectiva de ser aniquilados por Oraclón, Belle Star decide que han de entregarse porque “Después de miles de años dormidos nuestros poderes sexuales han despertado y nos han dado una nueva dimensión de poder… Podré vengarme en presencia del rey”. Acojonante, por lo menos hay que reconocer el valor (o la jeta) para atreverse a escribir esta frase, seguro que ni en las novelas de quiosco de 15 pesetas aparecían estas paridas. Se entregan y Oraclón los condena a la esclavitud y les muestra su planeta natal Hexalón desierto y sin vida. Como último deseo antes de empezar a servirle, Belle Star le pide poder despedirse de su compañero. Se besan, recargan así las pilas sexuales y tiene lugar una de las muertes más bizarras, ridículas y carcajeantes en la historia de la ciencia ficción. Lithan dispara energía azul con sus ojos, a la espalda de la princesa, que se llena de poder , y ésta a su vez besa a Oraclón, que, simplemente, desaparece en medio de un poquito de humo. El chico roba un arma, mata a los cinco guardianes (¿no hay más en una nave tan grande?), liberan a los reyes de la galaxia prisioneros, todos con coronas nuevamente robadas del aula de trabajos manuales del colegio y huyen haciendo explotar la nave del malo (otra vez trozos de la maqueta volando cuando se produce la explosión).

Regresan a la Tierra y son alegremente recibidos por los terrícolas, a pesar que los querían linchar cuando marcharon antes. Happy end, amigos.

Es muy complicado pensar cómo es posible que todos los que participaron en este engendro consiguieran un resultado tan terrible. Esto es lo que permite defender la peli como auténtica y valiosa caspa, sinceramente creo que intentaron que saliera más o menos bien, porque ni haciéndolo adrede se puede conseguir un resultado así. Es difícil que pasen más de cinco minutos de película, siendo generoso, sin que os tronchéis de la risa, ante un efecto cutre, un personaje ridículo, una situación cómica, o el bizarrísimo y vergonzante vocabulario que se puede escuchar durante todo el rato.

Por fortuna, casi ninguno de los responsables de esta plasta cósmica hizo nada más… Posteriores catástrofes de este estilo ya hubiera sido algo excesivo. El director Bitto Albertini participó en varias entregas de la saga erótica Emmanuelle junto a Don Powell y también realizó varias películas de aventuras, espías y romanos (y una de Jaimito). El único actor que tuvo una carrera de cierta duración fue Milt Jamin (Lithan), apareciendo en series de TV como Galactica, Falcon Crest, Magnum, Hill Street Blues, Cagney y Lacey…

PUNTUACIÓN:






Como podéis suponer, no he encontrado ningun vídeo de este engendro en YouTube.Os tendréis que conformar con imaginároslo o intentar buscarlo en los puntos de robo y pirateo habituales. Gracias a Xavi incluso hemos sabido que hubo gente que ¡tuvo una carrera después de esto! Si soy un productor o ejecutivo y viera que alguno de mis actores sale en esta mierda le pegaba una patada en el culo que lo mandaba de vuelta a LA TERCERA GALAXIA.